Moorea fue en sus orígenes una isla montañosa volcánica que se erguía a 3300 metros de altura. Se ubica en el Archipiélago de las islas de la Sociedad en Polinesia Francesa, a unos 17 Kilómetros al Noroeste de Tahití. Dicho volcán se derrumbó abriéndose al norte sobre el mar. Toda la parte norte del antiguo solar de la caldera esta ahora bajo las aguas.
La caracterizan sus dos celebres bahías de Cook y la de Opunohu. Su superficie es de 134 KM cuadrados, y su cumbre es el Monte Tohiea (1 207 metros).
Moora tiene numerosos picos montañosos que le permiten tener un paisaje excepcional
El monte Rotui (900m) que se ubica entre las dos bahías está formado por filones rocosos muy resistentes. El monte Mou’roa (880m), Mou’a puta (830 m), el monte Tearai (770 m), el monte Tautuapae (769 m), el Monte Fairurani (741 m) y el monte Matotea (714 m)
Presenta tierras montañosas y salvajes. Sus principales distritos son Haapiti, Afareaitu, Vaiare, Teavaro, Maharepa, Paopao, Papetoai, Hauru. Las raras llanuras están situadas cerca de las costas.
Toda la isla está rodeada por un arrecife de coral, y posee varias aperturas que dan al mar. Particularmente cuatro que se sitúan en el anden de Vaiare, de las dos bahías de Cook y de Opunohu, y hacia el sur. Hay también 2 islotes, llamados « Motu », situados al Norte-Oeste de la isla.
Moorea con todas sus riquezas naturales sigue siendo un destino a descubrir de otra forma que con fotos o tarjetas postales